El coronel Guillermo Benavides, quien fue declarado culpable de ordenar el asesinato de seis sacerdotes jesuitas en 1989, continuará detenido bajo la tutela del juzgado 4° de instrucción de San Salvador. Esta tarde, la Corte Suprema de Justicia envió la notificación del caso a dicha instancia, la cual lo condenó a 30 años de prisión en 1992.

"El juez Aristargo Chavarría analizará la información remitida que contiene la certificación de la resolución emitida del 16 de agosto por la Corte Suprema de Justicia (CSJ), que denegó la extradición as España de 4 militares y específicamente lo relacionado al coronel Benavides, y ver que procede en el caso,  mientras  tanto seguirá  guardando prisión", reza el comunicado emitido por el centro judicial Isidro Menéndez.

En dicha resolución, la CSJ negó la solicitud de extradición de los militares a España, luego de declarar inconstitucional la Ley de Amnistía y ordenó la libertad para los ex miembros del batallón Atlacatl: Ramiro Ávalos Vargas, Tomás Zarpate Castillo y Ángel Pérez Vásquez capturados el pasado 5 de febrero.

En su resolución también  ordenó que el coronel Benavides continúe detenido y pague la condenada que le fue impuesta en 1992.

La Ley de Amnistía fue aprobada en marzo de 1993, por Asamblea Legislativa, tras el fin de guerra civil salvadoreña que concluyó con la firma de los acuerdos de Paz de 1992 y que dejó más de 75,000 fallecidos y las 7,000 desaparecidos.