Una familia residente en la colonia Satélite, de San Salvador, tenía como mascota a un cocodrilo adulto hembra que medía 2.60 metros de largo, y que cuyo peso estimado es de 300 libras.

El animal había permanecido en cautiverio durante 14 años, y cuando los veterinarios del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) llegaron a rescatarlo, se encontraba en una piscina en desuso de la vivienda.

El reptil tenía el apodo de “Coco”, según informó Medio Ambiente.

“Por su tamaño y peligrosidad, fue necesaria la intervención de 5 de nuestros técnicos para inmovilizarlo y trasladarlo de manera segura”, detalló la institución respecto a las acciones que tomaron los veterinarios para proteger a la bestia.

Después de haberlo inmovilizado, "Coco" fue llevado a un área de conservación natural para este tipo de especies.

“Llevamos al animal a un área natural protegida para que permanezca en un hábitat acorde a su especie. Esta clase de reptiles, al ser seres primitivos, no pierden sus instintos de defensa, caza y reproducción”, informó el MARN.

La institución advirtió a la población que este tipo de animales no pueden ser conservados como mascotas.

“Si ves uno no intentes tocarlo o llevártelo”, recomendó a la población.

El reptil medía 2.60 metros y pesaba cerca de 300 libras.

Por su tamaño y peligrosidad, fue necesaria la intervención de 5 de nuestros técnicos para inmovilizarlo y trasladarlo de manera segura. pic.twitter.com/ve8mshWrMZ

— Ministerio de Medio Ambiente (@MedioAmbienteSV) November 5, 2019

La bestia permanecía en una piscina en desuso, ahí los técnicos del MARN lo inmovilizaron. 

Aunque estuvo en cautiverio, pero el instinto de defensa hace que estos animales sean agresivos.