Fuentes fiscales confirmaron que el fiscal Julio Arriaza regresó este martes a trabajar al ministerio público luego de permanecer detenido por varios días al ser involucrado en el caso Rais-Martínez.

Según se detalló, Arriaza ha sido trasladado a un área dentro de la Fiscalía en la que no tendrá acceso a los movimientos jurídicos que se realizan en la institución.

Este es el segundo cambio que se le realiza a Arriaza luego de la llegada de Douglas Meléndez. Hasta el momento de su captura, ocupaba el cargo de jefe de la unidad de Intereses del Estado.

El nuevo cargo que desempeñará mientras dure el proceso de investigación en su contra no ha sido detallado. "Mientras no sea condenado no se le puede suspender o despedir. Se debe seguir un procedimiento a través de auditoria interna para ser cesado en el cargo", explicó el ministerio público.

Arriaza se vio involucrado en el caso Rais debido a que la unidad que tenía a su cargo fue en la que se desarrollaron los procesos con los que se crearon supuestas pruebas falsas que favorecieron al empresario para castigar a sus enemigos.

Tal como se manifestó en la audiencia inicial, que se llevó a cabo el pasado fin de semana pasado, Arriaza tenía conocimiento de las pruebas falsas pero no alertó de éstas a sus fiscales.

El fiscal recuperó su libertad ayer luego de pagar una fianza de $5 mil y seguirá el proceso en libertad con las únicas restricciones de no salir del país y no cambiar de domicilio.