Una pareja de novios alegó sentirse estafada luego de participar por varias horas en un juego de azar en el campo de la feria de esta capital y haber perdido más de $400. Molestos, se avocaron a las instalaciones del la Defensoría del Consumidor que funciona dentro de las instalaciones del parque de diversiones, donde interpusieron la denuncia.

La noche del martes Alberto y Patricia acudieron al campo de la feria en las inmediaciones del estadio Cuscatlán y decidieron probar suerte en el juego de azar llamado “Anota un gol”. Jamás se imaginaron que los primeros dos dólares que invirtieron para iniciar la partida, terminaría al día siguiente con una pérdida total de $440.

La pareja se acercó a la DC a interponer una denuncia y estos asistieron a corroborar si habían sido víctima de estafa o no.

El juego consiste en ir sumando goles que se logran al tirar unas bolitas en un tablero. Los agujeros en el que caen las bolitas tienen un puntaje y la sumatoria de esto va determinando los goles. La meta es llegar a los 50 goles que tendrá como premio gordo $2,800 y otros premios grandes que constan de televisores plasma o un moderno aparato de sonido.

El juego inicia con una inversión de $2, pero cada vez que los números del tablero indican el número 28 el premio se duplica, pero también la inversión. Así, esta pareja incluso llegó a pagar $64 por cada tiro de bolitas.

“Fue creciendo y nuestro puntaje llegó cerca de los 50 goles, la meta era de 50 y la verdad llegamos a 48, pero tuvimos que invertir $140 para llegar ahí. Para ganar $2,800, nos faltaban solo 2 goles, pero para eso la inversión ya no era de $16, sino de $64”, relató Alberto.

Con la llegada de la madrugada, también se les acabó el dinero. Los hombres del negocio les dijeron que podían seguir al día siguiente, que consiguieran el dinero para continuar el juego.

Al día siguiente, armados con más dinero volvieron a jugar, pero perdieron todo una vez más, y ya no hubo más oportunidad. El monto total de lo perdido fueron $440.

Ante la desesperación, la pareja se acercó a la Policía Nacional Civil que está destacada en el campo de la feria, pero no obtuvieron ayuda. Ahí les dijeron se acercaran a la Defensoría del Consumidor, quienes fueron tomaron la denuncia y los acompañaron a una inspección y tratar de solventar el problema, ante los indicios de una posible estafa.

Al llegar y luego de una larga discusión, a la pareja le devolvieron $200, lo demás lo dieron por perdido.

La DC exigió al negocio que pusiera las reglas más claras y visibles, y que especificaran que el juego no era para menores de edad.

Defensoría opina estos negocios deben desaparecer

Según los trabajadores del negocio, este es un juego de azar y se pierde o se gana dependiendo de la suerte de las personas y no de trucos o artificios para arreglar los resultados.

“Las personas juegan, nosotros vimos que las reglas no están claras, pero es una decisión propia si uno juega o no. En este caso, los chicos al ver que iban ganando y como les faltaba poco puntaje para ganarse el premio mayor siguieron jugando y siguieron jugando; hubo un momento en que se les acabó la plata. Entonces la inversión se perdió”, explicó el encargado de la Defensoría en el campo de la feria.

El técnico agregó que a su criterio este tipo de negocios no deberían existir y cuestionó incluso el papel de la Alcaldía al dar los permisos para los juegos de azar, ya que no son familiares ni para menores de edad y dijo que estos espacios no están destinados para juegos de este tipo.

La Defensoría se limitó a decir que por el momento no pueden proceder a sancionar este tipo de negocios ya que la ley no tiene los suficientes dientes para hacer algo en contra. “No se pueden controlar, solo podemos recomendar a la población que se eduque y que sepa lo que va a jugar y decidir no jugar, pero eso es personal, yo a usted no le puedo decir juegue o no juegue porque es su plata”, expuso.

En los alrededores de “Anota un gol”, ubicado a la entrada de la Feria, se pasea un empleado de la empresa con una bolita invitando a las personas a probar suerte. La primera apuesta es de $2, pero luego todo se comienza a descontrolar. Los premios se van volviendo atractivos pero cada vez más difíciles.

Consejos para los juegos de azar

Si a usted le gusta divertirse en este tipo de juegos, ponga atención a algunos consejos que la Defensoría del Consumidor hace para estas fiestas:

* No dejarse llevar por la ilusión de ganar. Sea prudente con el manejo de su dinero.

* Antes de jugar consulte las reglas y condiciones del juego. El encargado del juego está obligado a brindar la información completa.

* El jugador tiene derecho a saber antes de jugar, la forma en que debe jugar, las oportunidades que tiene, las acciones que lo harán perder o ganar, y los diferentes premios que hay para cada juego.

* Hacer un rápido ejercicio mental sobre la probabilidad que se tiene de ganar o perder y razonar sobre si conviene o no jugar.

* Si durante el juego uno se da cuenta que no es lo que ofrecieron, tiene el derecho a que le devuelvan el dinero o den un pase para otro juego equivalente al valor cancelado.

 

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