Mientras Sonia tiene que hacer una gran fila bajo el sol para ingresar al centro penal La Esperanza y pasar por la molesta revisión penitenciaria para visitar a su esposo acusado de robo de instrumentos musicales, la exprimera dama y procesada judicial, Ana Ligia Mixco Sol de Saca pasa sin inconvenientes para visitar a su también cónyugue, el expresidente, Elías Antonio Saca, procesado por corrupción. 

De acuerdo a una fuente cercana, la exprimera dama tiene algunos privilegios. De hecho, no se somete a la revisión que cualquier otra mujer que va a ver a su esposo a ese centro penal, informó la fuente cercana a Centros Penales.

“A ella ni la tocan, le pasan una revisión general, como la que le hacen a los abogados o a un funcionario cuando ingresa a un centro penal, solo con el detector de metales y armas”, señala la fuente.

Así espera una persona común para ingresar al Centro Penal La Esperanza, mejor conocido como Mariona, sin embargo la exprimera dama, no pasa por todo este proceso, porque tiene un trato especial, reveló la fuente/ Foto El Salvador Times. 

Ana Ligia, llega a un área de visitas, casi nunca comparte con el resto de personas que acuden a la cárcel, de lo contrario le permiten que pueda realizarla con el menor número de personas en el área y que su estadía pueda ser hasta más extendida con el ex funcionario.

Pasa al área de la visita por un pasillo especial, sin la necesidad de caminar por las misma zona que el resto de familiares, reveló la fuente.

Esta es una de las  ventajas que conservará tras las medidas sustitutivas a la detención (restricción de salir del país) que conservará luego de la resolución del juez que le concedió mantener estas condiciones. 

La petición de medidas sustitutivas fueron solicitada por la Fiscalía, a pesar de que se sostiene que ella habría ayudado a su esposo a presuntamente blanquear al menos $22 millones a través de agencias de publicidad y un grupo radial.

Las acusaciones surgen de las investigaciones de la Fiscalía, quien deberá comprobar ante el tribunal si son ciertas o no. Por el momento, los acusados son inocentes de acuerdo al derecho que les confiere la Constitución llamado presunción de inocencia, que indica que nadie es culpable hasta que es vencido en juicio.