El ministro de Hacienda, Jerson Posada, aseguró que estos decomisos evitaron pérdidas fiscales para El Salvador por alrededor de $1.5 millones.
En un allanamiento ejecutado en el distrito metapaneco, la FGR se logró incautar de un total de 168,620 cajetillas de cigarrillos de las marcas Modern y Royal, cuyo comercio no está permitido en El Salvador.
"La mercancía fue ubicada en el interior de dos vehículos, los cuales fueron abandonados tras una persecución en el sector del paso fronterizo no habilitado Ostúa, Metapán", informó la Fuerza Armada.
La Fiscalía General de la República (FGR) señaló que este tipo de cigarrillo no cumple con las normas de sanidad por ser parte de una red de comercio ilegal y cada vez que las personas sean descubiertas con los productos deberán ser decomisados.
Además, al imputado se le decomisó un arma de guerra tipo subametralladora calibre 9 milímetros y cinco cartuchos. Los peritos expertos en armas determinaron que se encontraba en perfecto estado para disparar.
Según el motorista, él desconocía que en el auto, que es de su patrona, estuviera oculto el contrabando.
Una de las imputadas, quien se declaró inocente, aseguró que ha representado al país en la federación de voleibol. La mercadería fue valorada en más de $11,000.
