El negocio, que es popular por servir de punto de reunión entre parejas no casadas o acompañadas, que llegan para un encuentro ocasional está ubicado en la 11ª avenida norte, #444, San Salvador.
Los dueños del perro han colocado en el Facebook una nota que dice: "Me llamo Orco, por favor no me sigan robando, a mí no me gusta estar encerrado, ni amarrado, me gusta jugar en la playa".
La víctima no tiene antecedentes criminales, por lo que se cree que el caso podría estar relacionado a alguna rencilla personal.
El hotel se defiende de las acusaciones y explica que ella fue la responsable de daños dentro de la habitación que adquirió a través de un cupón.
De acuerdo con sus compañeros de trabajo, ambos tenían una relación platónica de amistad y sufrían de una profunda depresión.
Una salvadoreña también fue detenida junto al mexicano, ambos fueron señalados por el delito de tráfico ilegal de personas.