Dos de las víctimas fueron atacadas con armas blancas, una de ellas tenía 65 años; la más joven de aproximadamente 25 fue encontrada semidesnuda en una calle de Mejicanos.
Los hechos ocurrieron en sectores diferentes del municipio, las autoridades creen que los asesinatos tendrían que ver con pandillas.
Tras el ataque, Padilla fue llevado en una ambulancia hacia el hospital San Juan de Dios, pero minutos más tarde falleció debido a las heridas que presentaba.
Se espera que el Tribunal realice el juicio en contra de uno de los cuatro pandilleros en agosto de 2019.
El exsoldado junto a su papá y un hermano habían llegado a trabajar al lugar cuando fueron atacados. El hermano resultó ileso. Fue en un terreno ubicado en el caserío El Tigral, del cantón Palo Verde, de San Julián, Sonsonate.