El poderoso huracán María dejó daños "severos" en las infraestructuras y viviendas de Puerto Rico tras un paso que duró seis horas sobre la isla caribeña. Ahora, fuertes vientos y lluvias se registraban en República Dominicana por el paso del ciclón, sin que de momento se reporten víctimas o daños graves en este país.
 

Tras devastar Puerto Rico y arrasar las Islas Vírgenes y las Antillas, donde dejó al menos diez muertos, los efectos del huracán María comenzaron a sentirse con mayor fuerza en República Dominicana en la madrugada del jueves, cuando su centro se ubicaba a unos 85 km al noreste de Cabo Engaño.
 

Según la Oficina Nacional de Meteorología, el huracán María se desplazaba hacia el noroeste a unos 15 kilómetros por hora (kph), y sus vientos máximos sostenidos permanecían en 185 kph con ráfagas superiores, categoría 3 en la escala Saffir-Simson.
 

En este balneario turístico a unos 200 kilómetros de la capital, Santo Domingo, las ráfagas tumbaron algunos postes de electricidad y cientos de personas se hallaban sin servicio.
 

Las lluvias eran persistentes y las calles permanecían desoladas, mientras algunos trabajadores recogían postes, letreros y botes de basura.
 

La Oficina de Meteorología indicó que los vientos huracanados se extendían a unos 95 kilómetros fuera de su centro y los de tormentas en unos 240 kilómetros. 
 

En total se mantienen 21 provincias dominicanas en alerta roja, cinco en amarilla y seis en verde. Algunas comunidades se hallaban aisladas desde el miércoles por la crecida de ríos.
 

El huracán María se degradó la tarde del miércoles a huracán categoría 2, indicó el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos, pero se fortaleció al acercarse a las costas dominicanas.