El presidente francés François Hollande decidió otorgarle la gracia a una sexagenaria condenada a 10 años de prisión por haber matado a su violento marido  anunció este miércoles El Elíseo en un comunicado.

Hollande le acordó a Jacqueline Sauvage --quien se había cinvertido en un símbolo de las víctimas de violencia conyugal-- "una remisión graciosa del resto de su pena de cárcel", lo que "pone fin inmediatamente a su detención". 

"El presidente de la República estimó que el lugar de la señora Sauvage no es más hoy en día la prisión, sino junto a su familia", añadió el palacio presidencial.

Jacqueline Sauvage, nacida en 1947, mató a su marido en 2012 de tres disparos de fusil por la espalda tras haber sufrido durante 47 años su violencia, en particular sexual, de la cual también fueron víctimas sus cuatro hijos. Su acto tuvo lugar al día siguiente del suicidio de su hijo varón.

Sus tres hijas, que no han dejado de apoyarla, habían atestiguado contra su padre, explicando haber sido violadas y golpeadas por éste, al igual que su madre.

Sauvage había sido declarada culpable en primera instancia y en apelación.

Su caso conmocionó a la sociedad y se recogieron casi 436.000 firmas pidiendo la liberación.

El presidente Hollande le acordó una primera gracia parcial a comienzos de este año, lo que le permitió presentar inmediatamente una demanda de liberación condicional, pero el pedido fue rechazado por la justicia.

Según sus servicios, el jefe de Estado tomó su decisión, anunciada este miércoles, "tras contar con la opinión del ministro de Justicia", quien tomó el caso en sus manos después del rechazo en apelación de la demanda de libertad condicional.