El Juzgado Especializado de Sentencia para una Vida Libre de Violencia y Discriminación para las Mujeres de San Salvador condenó a 30 años de cárcel a un hombre que asesinó a golpes a una mujer en la colonia 22 de Abril, del distrito de Soyapango.

El condenado es Carlos Guzmán Franco, quien fue declarado culpable de feminicidio en perjuicio de la víctima reconocida por las iniciales J. C. R., ocurrido la noche del jueves 26 de octubre de 2023.

De acuerdo con las investigaciones de la Fiscalía General de la República, el día del crimen, el Guzmán Franco y la víctima abordaron un microbús de la ruta 41-A en la misma parada de buses. Dentro de la unidad de transporte público, el hombre intentó entablar conversación con la víctima, pero esta lo ignoraba.

La situación, según testigos, llegó a un punto de acoso por parte de Guzmán Franco, lo que derivó en una discusión entre ambos que fue interrumpida por otros pasajeros del microbús.

Tras el incidente, J. C. R. se bajó en la parada de la colonia 22 de Abril. Y Guzmán Franco, según observaron los testigos, también se bajó del microbús en la misma parada para seguir a la víctima.

En la madrugada del viernes 27 de octubre de 2023, una ciudadana reportó a la Policía Nacional Civil (PNC) el hallazgo del cuerpo de una mujer que se encontraba en la entrada de la colonia 22 de Abril, semidesnuda, con múltiples golpes en el rostro y la cabeza, provocados con un objeto contundente (una piedra) que el agresor dejó en la escena del crimen.

Los forenses que llegaron a la escena del crimen establecieron que un traumatismo craneoencefálico severo le causó la muerte a la mujer.

A raíz de este hecho, las autoridades recolectaron evidencias que llevaron a la captura de Carlos Guzmán Franco como principal sospechoso del crimen, gracias a que las cámaras de vigilancia de la municipalidad y del sistema Argus de la PNC captaron a la víctima y a Guzmán Franco siguiéndola luego de bajarse del microbús de la 41-A.

En las imágenes, se logró observar cuando la mujer, seguida por el feminicida, ingresó a una calle polvosa y solitaria. Fue allí donde Guzmán Franco la atacó de forma violenta y le provocó la muerte. Y fue allí donde horas después fue encontrado su cadáver.

Posteriormente, Guzmán Franco fue captado por las cámaras saliendo de esa calle y luego abordando un autobús que lo llevó hasta su vivienda en Cumbres de San Bartolo, en el distrito de Ilopango. El sábado 28 de octubre, la PNC lo arrestó en su casa y, según el reporte policial, entre sus pertenencias encontraron el celular de la víctima.

Entre las pruebas presentadas al juzgado se incluyó la declaración de un testigo a quien el acusado llamó admitiendo haber cometido el crimen, hecho que fue corroborado por la bitácora telefónica y por la activación de antenas, así como el análisis de cámaras de vigilancia. Además, las pruebas realizadas a los zapatos y a una mochila que le fueron incautados a Guzmán Franco al momento de su detención arrojaron resultados que coincidieron con el perfil genético de la víctima.

La oficina de prensa de los Centros Judiciales detalló que la jueza Especializada de Sentencia identificó "una actitud de odio y desprecio hacia la mujer por la forma violenta en que se le dio muerte y al dejar su cadáver tirado en la calle expuesto; el procesado aprovechó su superioridad física y el estado de vulnerabilidad de la víctima".