Cuatro sujetos de origen guatemalteco han sido condenados a prisión por ofrecerles trabajo a unas 40 personas a las que terminaron privando de libertad y obligando a vender piñas en la ciudad de San Miguel.

Los condenados responden a los nombres de Edwin Antonio Juárez García, Edgar Francisco Juárez García, Francisco Javier Yuman Herrera y Cristian Eduardo Yuman Herrera, todos originarios de Guatemala.

El orden de los hechos establece que un equipo de la Policía Nacional Civil (PNC) estaba cumpliendo una orden de allanamiento a una vivienda ubicada en la colonia Andalucía de San Miguel.

Los agentes vieron en la casa cartones tirados por todo el suelo y descubrieron a un grupo de personas, quienes les dijeron que estaban siendo obligados a trabajar, por lo que los agentes arrestaron a los hermanos Edwin y Edgar Juárez García.

Por medio de una declaración de los afectados también se identificó a otros dos responsables, los también hermanos Javier y Eduardo Yuman.

Los afectados narraron que los cuatro sujetos ofrecían a las personas en varias comunidades de Guatemala un trabajo en El Salvador y a los que aceptaban los traían por medio de puntos no habilitados hasta San Miguel.

Ya en la ciudad oriental los privaban de libertad y los obligaban a vender piñas en diferentes carreteras del municipio, les imponían una cantidad al día y en caso no cumplían los agredían físicamente.

La Fiscalía General de la República (FGR) verificó que las víctimas eran sometidas a condiciones inhumanas ya que dormían en el suelo y en sitios insalubres, las deban poca comida y no les pagaban nada.

El ministerio público acusó a los dos pares de hermanos del delito de trata de personas en la modalidad de trabajo forzado y el Tribunal 2° de Sentencia de San Miguel validó las evidencias y condenó a los responsables a 16 años de cárcel.