• Diario Digital | viernes, 26 de abril de 2024
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Judiciales - por estafa

Maestra fingió padecer depresión y cáncer para estafar con $75,000 a tres empresarios

Según los demandantes la mujer no padecía de cáncer y que desconocían el paradero del dinero que se ellos dieron para ayudarlos

Empresarios
Prometió devolverles el dinero con jugosos intereses una vez la constructora volviera a funcionar.
Maestra fingió padecer depresión y cáncer para estafar con $75,000 a tres empresarios

Una maestra y su hijo fueron llevados a los tribunales luego de estafar a tres empresarios a los que la mujer fingió padecer de depresión y posteriormente cáncer para obtener el dinero que sirvió para el pago de la deuda que tenían en la empresa constructora del hombre en San Salvador.

Silvia L., de 55 años y su hijo Rolando, de 31, idearon un plan para tratar de buscar la compasión de tres empresarios a los que conocían y así poder sacar adelante la empresa de construcción que instalaron luego de que el imputado se graduara como ingeniero civil.

Según el expediente judicial, todo comenzó en 2015 cuando el negocio se comenzó a venir abajo por cuantiosas pérdidas, a tal punto de no tener la solvencia económica para pagarles a sus proveedores.

Abusando de la confianza que Silvia tenía con tres ejecutivos de empresas de otros rubros se contactó con ellos para pedirles $25,000 a cada uno para poder inyectar capital a la empresa de su hijo.

Las mentiras

En lugar de presentar un plan financiero para que los ejecutivos vieran el tema como una inversión, la mujer logró obtener el dinero a través de los llantos que fingía asegurando que había caído en depresión debido a los problemas financieros de su hijo.

Al escuchar el panorama descrito por su "amiga", los empresarios no dudaron en acceder a las peticiones de la mujer quien les  prometió devolverles el dinero con jugosos intereses una vez la constructora volviera a funcionar. El estudio a las cuentas de Rolando señaló que recibió $75,000.

Llegado el plazo establecido por los estafadores, Rolando comenzó a notificar a sus prestamistas que había comenzado a realizar abonos a las cuentas bancarias de estos, algo que también era mentira y que enfureció a los ofendidos.

Luego de verificar que el ingeniero no había realizado deposito alguno en sus cuentas, las víctimas se presentaron a la empresa del hombre para exigirle una explicación pero su madre se entrometió y pidió que dieran más tiempo ya que ella también había sido diagnosticada de cáncer por lo que su hijo no pudo estar al tanto de sus negocios.

Nuevamente, los empresarios le otorgaron el beneficio de la duda a madre e hijo quienes estuvieron evadiendo a sus prestamistas durante varios meses hasta que se vieron obligados a firmar mutuos donde se comprometían a entregar todo el dinero entre enero y marzo del 2017.

Sin embargo, Silvia y Rolando nunca pagaron ni un centavo de lo adeudado y fueron denunciados por estafa en la Fiscalía General de la República (FGR). ya que según los demandantes la mujer no padecía de cáncer.

El caso ha llegado a la etapa en la que se decidirá si pasa a sentencia o no, luego de que los imputados incumplieran con el acuerdo de conciliación avalado en el tribunal de Instrucción. Silvia y Rolando se sentarán en el banquillo de los acusados el próximo 20 de febrero. 

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