Probablemente tener sexo en el agua como en el mar, en una piscina o bien en un Jacuzzi, puede que sea una de fantasías de algunos por ahí, no obstante hay que analizar algunas consecuencias como accidentes, enfermedades o dolores.

El periódico The Huffington Post publicó un listado de situaciones que pueden afectar la salud de los practicantes e invita a que esa fantasía se reconsidere o en todo caso se utilice un buen lubricante a base de silicona para prevenir problemas serios.

Según el escrito del periódico Neoyorkino, el sostener esta práctica puede generar infecciones serias, debido a que en el agua hay miles de bacterias que probablemente en la piel no signifiquen un riesgo mayor, pero la situación cambia cuando entran en las mucosas de la piel como los genitales.

Aunque muchos pueden pensar que el agua es lubricante, pues la verdad es que no, en realidad es hidratante que es una función muy diferente, y la lubricación que alcanzan los cuerpos en un estado de excitación se pierde con el agua.

La probabilidad de adquirir una enfermedad aumenta con creces debido a que sin la lubricación natural, aumenta la fricción de los cuerpos que se rozan y es entonces cuando en lugar de ser placentero se vuelve una mala experiencia.

Además considere que tener sexo bajo la ducha aumenta la probabilidad de caerse y golpearse la cabeza.

Finalmente, reconsidere esta experiencia por el simple hecho que en una superficie húmeda la probabilidad de resbalar aumenta considerablemente y todas las acrobacias que los amantes hubieran gustado practicar se volverán una verdadera pesadilla.