Enzo Zepeda, de 12 años, tenía buena parte de la tarde del jueves de estarle pidiendo permiso a su madre para poder salir a jugar con sus amigos a una cancha del fútbol del cantón Tonalá, de Sonsonate; cuando finalmente lo dejaron salir a jugar murió arrollado por un conductor.

Instantes después del accidente fue llevado por particulares al hospital, pero perdió la vida minutos después.

Fuentes policiales informaron que la madre relató que el pequeño quería salir a jugar con unos amigos, pero ella no estaba segura de darle el permiso porque debía pasar por una calle del cantón que suele ser peligrosa.

Finalmente y luego de la insistencia del pequeño, la madre accedió y le dijo que tuviera cuidado, sin imaginarse lo que estaba a punto de suceder.

Enzo salió, iba cruzándose la calle en el instante en que un conductor manejaba a excesiva velocidad y no se detuvo a tiempo y golpeó al muchacho lanzándose varios metros por la calle.

Habitantes del lugar corrieron a avisarle a la progenitora, quien llegó a los pocos segundos encontrando al niño golpeado en la calle, pero aún con vida.

Un conductor solidario se detuvo, le ayudó a la mujer a subir al pequeño al vehículo y salieron rumbo al hospital… pero Enzo no resistió y murió a pocas cuadras del Hospital Nacional de Sonsonate Jorge Mazzini Villacorta.

La Policía informó que al enterarse del caso un grupo de agentes policiales patrullaron la zona en búsqueda del responsable, pero hasta el momento no lo han encontrado.

Cuando sea ubicado, dijo la PNC, será capturado por el delito de homicidio culposo.