Las autoridades sanitarias salvadoreñas enviaron muestras de sangre de varios reclusos de las bartolinas de Cuscatancingo hacia laboratorios del Atlanta, Georgia, Estados Unidos para confirmar o descartar si un brote contagioso en ese recinto es meningitis.

Preliminarmente, los médicos atiende a los pacientes bajo la presunción de que es un brote de escabiosis, aunque uno de los reclusos, Milton Hernández Rosales de 30 años, murió la noche del pasado sábado, presentando síntomas de lo que los médicos han clasificado como fiebre eruptiva.

Otros siete reclusos están ingresados en el Hospital Nacional Zacamil, y están en cuarentena.

Desde hace varias semanas, los reclusos han presentado diferentes molestas, como explicó una familiar de un reo. 

“Ellos tienen llagas en la piel y están desesperados, porque se desmayan de las grandes fiebres que les dan”, explicó la mujer que prefirió no ser identificada. 

En el recinto, hay cerca de 80 reclusos, cuando la capacidad es menor a las 30 personas, lo que pone en condiciones de hacinamiento a los privados de libertad, favoreciendo el aparecimiento de enfermedades, así como lo han expresado las autoridades del Ministerio de Salud en diferentes ocasiones.

Desde hace cuatro días, se lleva a cabo una campaña de salud en ese centro para atender un brote de lo que los médicos consideran es una brote de escabiosis. 40 detenidos están recibiendo atención.

La escabiosis o sarna es causada por ácaros que se introducen en la piel abierta y que depositan huevos que se encuban en un aproximado de 21 días, para luego eclosionar en erupciones con pus, convirtiéndose en una enfermedad altamente contagiosa.

“A los reclusos, se les está suministrando antibióticos que al parecer están haciendo efecto”, explicó el jefe policial de la zona.