Eran los 2:40 de la tarde del pasado lunes 1 de octubre, cuando Keny A., de 38 años de edad, logró superar a su esposo y quitarse la vida tras varios intentos que habían sido frustrados por él quien se aferraba a la vida que ella ya no estaba dispuesta a sobrellevar..

Keny murió casi al instante luego de caer desde el cuarto nivel de los apartamentos Robles de América, ubicados en las cercanías de la Alameda Juan Pablo II y la torre administrativa del Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS) en San Salvador.

Las primeras indagaciones realizadas señalaron que problemas psicológicos llevaron a la mujer a tomar esta falta decisión la cual deja sin su madre a una niña de 10 años quien además fue testigo de su autoatentado.

Un conocido habló con El Salvador Times y detalló la escena que se vivió en la zona que se paralizó por varias horas tras la brutal caída de la mujer que terminó desfigurada en la acera.

A continuación el relato:

"Escuché los primeros vidrios que se quebraron, incluso a mi me cayeron unos encima. Vi que ella estaba contra la pared y la mitad de los vidrios de la ventana. El esposo trataba de convencerla de que no se lanzara.

Ella hizo un pequeño movimiento hacía atrás y quebró los vidrios de la ventana y como no tenían balcones se fue de espalda y comenzó a caer, primero rebotó con las costillas en el pasamano de las gradas y luego pegó con la frente con el filo de la cuneta. En la ventana quedó el espacio donde con su cuerpo quebró siete vidrios.

El esposo al ver caer por la ventana a Keny gritó y cuando bajó a la primera planta quedó en estado de shock. Se acercó al cuerpo pero no dijo nada. Se quedó como un espectador más.

Los vecinos lloraban, estaban muy preocupados y afectados por lo que le había ocurrido a Keny. Yo me quedé sorprendido y cuestionaba de como ella tuvo el valor de hacer eso, teniendo a su niña pequeña. Al verle su cara destrozada me dio un sentimiento, me tocó llamar al 911, me entrevistaron al igual que a su esposo.

Toda la gente que lloró, gritó y se preocupó por ella. Pedían que le salvaran la vida. Después de que cayó de la cuarta planta, cuando llegó la ambulancia ya era tarde, en esos cinco minutos que se tardaron ella agonizó y luego murió".

Extraño comportamiento de la pareja

Previo al relato, el amigo de la familia recordó que un día antes encontraron restos de vidrios en la primera planta del condominio, posteriormente se confirmó que estos eran de la ventana del apartamento de la mujer, más no se tiene claro como llegaron hasta allí.

En la zona, la pareja era conocida por padecer de problemas psicológicos. Ella un poco más avanzados, mientras que él por lapsos actuaba de una manera que los vecinos catalogaban como extraña. Ambos acudían al hospital psiquiátrico.

Ambos se dedicaban a vender periódicos y asistían a una iglesia en la que trataban de sobreponerse a los problemas mentales, que en ocasiones afectaban a la hija de ambos quien también era protegida por el hombre.

"Ya habían sucedido problemas antes de que se suicidara, pero desde hace 15 días se le veía más alterada y con alucinaciones más avanzadas", detalló la fuente.

"Padecía de alucinaciones, a veces decía que estaban raptando en la casa y no quería que le quitaran a su hija, en otras tocaba la puerta a los vecinos para pedirles que le regalaran una llamada y sólo marcaba los números sin llamarle a nadie. En alguna ocasión salía afuera del condominio a caminar descalza", agregó.