Para tratar de detener el repunte de los homicidios de los últimos días, el Gobierno decidió mezclar pandilleros rivales en las mismas celdas en los centros penales; sin embargo, esa medida podría causar la unificación de los grupos terroristas, advirtió el criminólogo Carlos Carcach.

El repunte se inició el viernes cuando se cometieron 24 asesinatos, una cifra que dista mucho del promedio diario de los últimos meses y se mantuvo con cifras similares en días posteriores.

Las autoridades de Seguridad Pública y el presidente Nayib Bukele anunciaron medidas más duras para los pandilleros.

Una de esas medidas fue mezclar en las celdas de varios penales a pandilleros rivales, además de colocarles planchas de metal en los barrotes para impedir que se comuniquen entre ellos. Sin embargo, esas acciones podrían no dar los resultados esperados, dijo Carlos Carcach.

“Probablemente esto lo que pueda causar es la famosa unificación de las pandillas, de la que se habló como una posibilidad en el pasado... que se acelere ese proceso como resultado de esa amenaza es la posibilidad uno”, dijo en Frente a Frente.

Una segunda posibilidad está relacionada al contexto de la pandemia de coronavirus. Un reo infectado puede contagiar a los demás dejando “consecuencias fatales” en muchos.

“Podrían haber consecuencias fatales a las personas expuestas a ese riesgo, hacinamiento y sobre todo exposición extrema al riesgo de infección”, agregó.

La tercera posibilidad es que los pandilleros que están libres incrementen su nivel de violencia a modo de respuesta por las medidas a las que están siendo sometidos los líderes criminales en los penales.

“Uno no quisiera eso, pero es una posibilidad, que los grupos que están fuera de las prisiones reaccionen de manera violenta ante lo que ellos podrían percibir como una respuesta desproporcionada del gobierno”, indicó.

La última posibilidad tiene que ver con que los pandilleros reduzcan las acciones buscando que se desista de las medidas en las cárceles.

“Podría ocurrir que como niños malcriados llegue un momento y digan ‘Sí papá, reconocemos que hemos fallado y nos vamos a tranquilizar para poder jugar con los carritos, comer dulces y reventar piñatas’, hay tantas posibilidades que uno desconoce cuál es la dinámica que pueda estar ocurriendo”, señaló el experto.

La tregua de 2012 y regreso a la “normalidad”.

Las posibilidades tienen como punto de partida, explicó, que en el país ya hay un antecedente de relaciones de conveniencia entre mareros y es la tregua entre pandillas impulsada durante el gobierno de Mauricio Funes y el FMLN.

“La experiencia pasada nuestra lo llevaría a creer que algún grado de relación, no necesariamente amigable sino de conveniencia, existe entre los grupos, independientemente de que sean rivales o no que y eso podría llevar a que ellos decidan responder de manera más violenta”, explicó.

Consideró que la situación de los homicidios es como los terremotos, suceden a diario, pero hay algunos que se perciben más que otros, también existen enjambres que suelen preocupar de mayor manera.

Carcach agregó que podría ser que en algún punto se regrese a la “normalidad”, pero no se sabe a cuál, a días antes del repunte de homicidios o a la de años anteriores cuando que el promedio eran más de 10 por día.