Las autoridades aseguran que las mujeres pertenecen a la Mara Salvatrucha (MS-13) y que avisaban a la pandilla sobre los movimientos de la Policía.
Las acusadas recogían la extorsión de un grupo que aseguraba ser parte de la pandilla Barrio 18.
El condenado se encuentra prófugo, por lo que se emitió una nueva orden de captura para que cumpla con la pena.
El delincuente luego aumentó el cobro de la extorsión a $100. La víctima no soportó más la situación y lo denunció.
Fue detenido en flagrancia por la Policía. Será acusado de extorsión agravada.
Las autoridades aseguran que Santos Sierra exigía grandes cantidades de dinero, con amenazas de que si la persona no le entregaba el dinero, atentaría contra su vida y la de su familia.
En el juicio, los condenados confesaron el crimen. Además, deberán pagar una cantidad de dinero en concepto de responsabilidad civil a la víctima.