El principal sospechoso es Erick Alexander Mejía Alfaro, de 35 años de edad, compañero de vida de la víctima, quien huyó tras el crimen.
El crimen ocurrió en el cantón San Felipe, de Apastepeque. Según las versiones preliminares de la Policía, el compañero de vida de la víctima habría atacado con un arma blanca a la mujer en medio de una discusión.
Cuando los agentes llegaron, pudieron ver que la pequeña había sido atada de pies y manos y luego colgada por Rosales Martínez, como castigo, luego de que la madre salió de casa y haberse quedado a solas.
La víctima, cuya edad se calcula entre 20 a 25 años, no fue identificada ya que no portaba documentos de identidad personal.
Se presume que a la mujer la asesinaron en otro lugar y fue trasladada en vehículo al sector y después la lanzaron a la calle.