Aún permanece fresco el recuerdo del ingeniero Rigoberto Arnulfo Orellana Canales, atacado al negarse a ser asaltado; y de Luis Alberto Ramírez Oliva, encontrado lapidado en una calle.
Los restos del ingeniero asesinado, Rigoberto Arnulfo Orellana Canales, fueron enterrados en el cementerio del cantón Joya de Cerén donde cientos de personas participaron para darle el último adiós.
Aunque el caso es catalogado en esta etapa de la investigación como suicidio, la Fiscalía dio a conocer que investigará para descartar que sea homicidio.
La víctima mortal es Javier Cristiani quien al momento de ser arrollado iba en una bicicleta.
La víctima se bajó de un bus del transporte colectivo de la ruta 202, que de Ahuachapán conduce hacia San Salvador, y cuando intentaba cruzar la calle ocurrió el percance.
Díaz Rodríguez, quien ostenta el cargo de inspector jefe dentro de la corporación policial, se conducía en un vehículo marca Toyota año 2018 y con placas P 840-583 el cual fue a impactar contra otro automotor tipo sedán.