Las subdelegaciones que serían objetos de ataque por los delincuentes son las de San Rafael Cedros y San Martín. La información acerca de los atentados fue informada a los agentes la mañana del sábado, según dijo una una fuente policial a El Salvador Times.
Se está investigando si estas armas podrían haber sido utilizados por los delincuentes para atacar a los agentes de la subdelegación de San Martín, tras conocerse el fin de semana de un supuesto plan de atentados contra policías por parte de la MS
Josué Fuentes Ponce, de 16 años, Joel Escobar, de 17 y otra adolescente de 14 años, Cynthia Hernandez Nucamendi, serán acusados de homicidio y juzgados como adultos.
Este es el segundo ataque en lo que va del día contra agentes de seguridad, ya que en horas de la tarde fue asesinado un cabo de la policía en San Juan Nonualco.
Se espera que el Tribunal realice el juicio en contra de uno de los cuatro pandilleros en agosto de 2019.
Los individuos llegan en un vehículo sedán color gris, tres de ellos se bajan y se dirigen a un grupo de personas que están sentados afuera de unos locales.
Los pandilleros no se percataron que durante dos horas dos personas observaron lo que le hicieron a un hombre de 32 años de edad.
Según la Policía, a todos los detenidos se les atribuye el delito de agrupaciones ilícitas establecido en el artículo 345 del Código Penal.
Los cuerpos de los tres sujetos fueron abandonados en un sitio que está escasamente poblado, por lo que la recuperación de los mismos ha sido complicada.
El exsoldado junto a su papá y un hermano habían llegado a trabajar al lugar cuando fueron atacados. El hermano resultó ileso. Fue en un terreno ubicado en el caserío El Tigral, del cantón Palo Verde, de San Julián, Sonsonate.
