Los condenados ofrecían viajes ilegales a las víctimas con destino a Estados Unidos y les cobraban miles de dólares; además, aceptaban vehículos particulares y terrenos.
Todas fueron llevadas al Centro de Atención Integral para Personas Extranjeras Migrantes (CAIPEM), en donde recibieron atención y posteriormente serán deportadas a su país.
Los dos actuaron como cómplices de los pandilleros, quienes extorsionaron a la víctima durante 10 meses de 2018.
En el ataque armado también resultaron heridos otros dos. Se maneja la hipótesis que fueron atacados por pandilleros.
Las autoridades investigan si se han cometido ilícitos contra las mujeres extranjeras.
Ambos serán acusados por hurto agravado en un juzgado de Paz.
Al revisarles las licencias y permisos de conducir se verificó que no tenían dichos documentos en regla.
