El caso estuvo en el centro de la polémica en un país donde el aborto es legal siempre y cuando sea producto de "violación o riesgo de vida para la madre", que según los especialistas en la salud se cumplieron en el caso pero no fueron aplicados y obligaron a la niña a sufrir una vez más.
“Cuando sale la noticia da la impresión de que varios efectivos de la Fuerza Armada tomaron a la mujer y la violaron y no fue así”, aseguró el Ministro de Seguridad David Munguía Payés.
La madre ayudo a su hijo a ocultar la escena y crearon una coartada para demostrar que todo se trató de un accidente de tránsito.
El homicida apuntó con una AK-47 a su hermana, dejando ir varias ráfagas de balas que terminaron con su vida en cuestión de segundos.
De acuerdo a lo expresado por la imputada, ella supo que estaba embarazada de tres o cuatro meses, luego de haber sido violada por cinco sujetos miembros de pandillas
Flores llegó a al vivienda de la víctima, empezaron a discutir y el sujeto la golpeó y luego la agredió sexualmente con extrema violencia, según informes de la Fiscalía
India había endurecido las leyes para las agresiones sexuales en 2013, tras una violación en grupo en Nueva Delhi.
La perrita, que fue encontrada en la calle sangrando tenía destrozado el conducto de la uretra y las paredes de la vagina porque además de ser víctima de un abuso sexual, le habían introducido un objeto punzante.
La víctima se dio cuenta de que su pareja sentimental pertenecía a la pandilla 18 cuando le encontró unos cuchillos, cartuchos para armas, gorros, uniformes militares y otros objetos.