Esa casa, la número 11 del pasaje Estévez, fue el lugar de habitación del expolicía Hugo Osorio, pero también la usó para asesinar a sus víctimas, en su mayoría mujeres.
A las 3:00 de la madrugada del domingo 15 de enero, los familiares aseguran que encontraron la puerta abierta de su casa, pero ella no estaba en su interior.
El hombre conducía un pick up marca Kia y, en el momento en que fue a chocar, se habría encontrado en estado de ebriedad. La Policía sometió a una prueba de alcoholemia al conductor y resultó con 242 "grados" de alcohol.
La Policía Nacional Civil recibió reporte del caso a las 6:00 de la mañana de este jueves 22 de diciembre a través de una llamada anónima que denunció que en la vecindad se escucharon disparos.
La víctima, propietaria de la casa, denunció que el hombre ingresó a la fuerza a la vivienda. Según la FGR, la víctima intentó dialogar, pero recibió amenazas de muerte por parte del acusado.
El incendio fue reportado este martes 6 de diciembre por la mañana. El fuego también consumió otra casa de lámina y madera al lado de la tapicería. No se reportan personas afectadas.
La vivienda de René Armando Jiménez carecía de luz eléctrica, por lo que se alumbraba con velas y lámparas de mano. El fuego de una vela que dejó encendido podría haber sido la causa del incendio, dijo una fuente de Bomberos.
Preliminarmente, el caso se maneja como un suicidio, aunque la Policía investigará para descartar un homicidio.
