Una brasileña cumplió su mayor fantasía con ayuda de sus amigos quienes simularon una vela por su muerte, esto para cumplir con su deseo que tenía desde hace 14 años.

La mujer tuvo que rogar al dueño de una funeraria para que accediera a permitirle ser velada en vida, para que sus amistades llegaran al lugar y se pudieran despedir de ella.

Lucía Vera se maquilló para lograr el color de un cadáver y pasó acostada durante todo el día -de 9 de la mañana a 6 de la tarde- en el ataúd que fue rodeado de flores.

En un primer momento la familia de Lucía rechazó la idea pero al verla que era su sueño y que llevaba 14 años queriendo realizarlo optaron por rendirse y acompañarla en su "última noche" con ellos.

La mujer detalló que incluso un amigo de ella lloró y le pidió que se levantara, esto debido al realismo de la escena para la que tuvo que invertir una fuerte suma de dinero.

Tras ese largo velatorio de nueve horas, la mujer quiso cumplir un último deseo: que le cubrieran el ataúd y fuera traslada durante dos minutos, como si fueran a enterrarla, pero al final terminó llegando a su casa con su sueño cumplido.