El taxista que puso al borde del suicidio a un anciano jubilado al estafarlo con $10,000 fue condenado a cuatro años de prisión por los engaños que este le hizo para supuestamente conseguirle un taxi.

Santos Esteban Maldonado también deberá pagarle a Carlos Humberto Morales la cantidad de $5,000, producto de la responsabilidad civil por los hechos acontecidos entre mayo y agosto de 2014.

Maldonado fue la conexión de Morales con José Luis Guerrero, un comerciante del mercado La Tiendona, quien le prometió el taxi que el anciano de 76 años deseaba, esto a cambio de $7,000.

Con engaños, Guerrero consiguió que Morales le entregara $10,000, los cuales se repartía con Maldonado, luego de que los tres departieran en un bar de San Salvador.

Morales aseguró haber pensado en el suicidio al verse despojado de los $10,000 y no tener el taxi que deseaba para alquilarlo y obtener ganancias extras.

El juzgado Cuarto de Sentencia determinó la responsabilidad de Maldonado en este caso, haciendo caso omiso de la versión de Maldonado, quien alegó que solamente recibió una “pata de cheje” por haber presentado a Morales con Guerrero.

Al ser una pena de cuatro años de prisión el delito no puede ser sustituido por trabajo de utilidad, por lo que el taxista será enviado a un centro penal a cumplir la condena.

En tanto, Guerrero, el otro de los señalados en el caso, es perseguido por las autoridades, ya que este debe de responder por la otra mitad del dinero que entregó Morales y la hipoteca de la casa, que fue obligado a firmar.

Este caso sería la referencia para que el juzgado de Paz de La Libertad decida sobre el litigio legal que tiene Morales con la prestamista Vicenta viuda de Arellano, quien reclama la propiedad que le fue entregada por Morales.