Un loro fue el testigo clave para resolver el caso del asesinato de un hombre quien fue atacado con cinco disparos por su esposa frente a la mascota que grabó en su mente las palabras que fueron proferidas en el hecho en el que, la mujer, también intentó quitarse la vida.

El portal de noticias de Yahoo señala que hace dos años Glenna Duram asesinó a su esposo, Martin Duram, hecho por el cual tendrá que pasar tras las rejas por el resto de su vida, gracias a que la mascota le relató parte de lo sucedido al juez.

“¡No dispares!” o “cállate la boca” fueron algunas de las frases que repitió el peculiar testigo (de nombre Bud) quien incluso fue capaz de cambiar el tono de voz imitando tanto a Glenna como a Martin. El animal fue presentado al tribunal por el padre de la víctima luego de escucharlo en su casa.

Los hechos ocurridos en 2015 en la ciudad de Newaygo en Michigan fueron recopilados inicialmente como un suicidio, Glenna fue encontrada junto al cuerpo de su marido con un disparo en la cabeza, pero fue trasladada a un centro asistencial donde evitaron su muerte.

La mujer, condenada a cadena perpetua, fue quien inició la discusión en la casa que compartía con su compañero de vida y con quien desde hace un tiempo tenía como mascota al loro gris africano, una especie que según expertos son capaces de reproducir con nitidez frases que tan solo escucharon una vez.