La Dirección General de Centros Penales (DGCP) informó que en las últimas horas se ha revocado el beneficio del brazalete electrónico a tres sujetos, uno de ellos acusado de agredir a su esposa e hijo.

La información fue confirmada por el director de las cárceles, Osiris Luna.

El primero de los casos es el de Marvin Rivera, quien en 2019 estaba siendo acusado por los delitos de hurto y amenazas, pero el 26 de noviembre de ese año el juez del Juzgado Especializado de Instrucción de Santa Ana le dejó en libertad con la colocación del brazalete electrónico.

Rivera fue capturado por agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) de Sonsonate, el jueves, por lesiones y amenazas en contra de su esposa e hijo, según las investigaciones que se llevan a cabo.

Esta nueva acusación en su contra le valió para que el brazalete le sea retirado y para que afronte los procesos judiciales desde la cárcel.

A dos pandilleros de San Miguel, identificados como José Marcos Argueta, de 43 años, y Geovany Alexander Díaz de 32, también se les retiró el beneficio.

De acuerdo con las autoridades, ambos fueron procesados por homicidio agravado y organizaciones terroristas, respectivamente, en 2018, pero el 22 de mayo de ese año un juez ordenó arresto domiciliario y que se les colocara el dispositivo electrónico.

Argueta y Díaz violaron los términos judiciales, por lo que las autoridades aprovecharon el jueves que a ambos les tocaba presentarse a firmar al Juzgado Especializado de Sentencia de San Miguel para aprehenderlos.

El juzgador decidió la suspensión del arresto domiciliar y firmó las sentencias para que cada uno cumpla las condenas de 28 años por asesinato, en el caso de Argueta, y de ocho para Díaz en la cárcel.

La Subdirección de Monitoreo de Centros Penales es la encargada de retirarles los brazaletes a los tres.

Fotos: Centros Penales.