Junto con el histórico narcotraficante se entregó Joaquín Guzmán López, hijo de “el Chapo” Guzmán.
El capturado es reclamado por el Juzgado de Primera Instancia de La Libertad al ser acusado de facilitación de medios, actos preparatorios y proposición, conspiración y asociaciones delictivas.
Durante el partido, se desplegó una pancarta negra con letras blancas en el sector donde se ubicó la barra "Fiel Plateada" del Platense la cual decía: "Quizás mi madre no sabe de fútbol, pero quiere que gane mi equipo solo por verme feliz. ¡Felíz día de las madres!".
Después de ser deportado, se encargaba de tatuar a los pandilleros y de trasladarlos después de cometer los delitos, según investigaciones de la Policía.
El alboroto fue grande y provocó que dueños de negocios se unieran en un proyecto común y decidieron ofrecer su apoyo político a Nicolás S. para apadrinarlo en su boda.
En el cartel escribió su número de teléfono (7151-1496) para que lo contacten.
