La PNC aseguró que en la zona en la que se cometió el asesinato es un lugar asediado por la pandilla 18 y que difícilmente habrán testigos, porque no hay otras casas en la cercanía.
La información preliminar que manejan las autoridades es que los tres individuos ya tenían vigilado al hombre y al llegar a la zona del Platillo lo interceptaron, le dieron la golpiza y le robaron parte de sus pertenencias.
El hombre asesinado no pertenecía a estructuras criminales, según informó la PNC.
El hombre le habría dañado el hígado, la vejiga y otros órganos a la víctima, según determinaron los médicos que atendieron a la mujer.
Los oficiales de la PNC detuvieron al hombre y lo llevaron a las bartolinas de la delegación centro de San Salvador.
La víctima fue asesinada cuando iba a ingresar a su casa, los pandilleros le dispararon y ocultaron el cuerpo en su vivienda, lugar en el que lo acribillaron a balazos y robaron sus pertenencias.
La víctima resbaló del bus, por lo que cayó al pavimento y el automotor continuó su marcha por lo que fue atropellado por este. El cuerpo quede abajo de una de las llantas de la unidad de transporte.
De manera extraoficial, se identificaron a los sujetos como Carlos Hull y su hijo Jhon David Hull, quienes golpearon a un hombre que estaba tirado en el suelo y al que al parecer también lastimaron con un bate que se observa al fondo de la escena.
De manera extraoficial, se conoció que Gómez había asistido al funeral de un amigo, pero esta información no fue confirmada por la policía local.
Según la PNC, el dueño del establecimiento fue quien alertó a las autoridades de lo sucedido, por lo que llegaron al lugar para realizar las inspecciones.
