De acuerdo con el periódico El Clarín de Argentina, la mujer policía estaba destacada en la Policía Científica de Castelar.
El policía estaba de licencia al momento del ataque.
"Era un compañero disciplinado, polivalente ―se llevaba bien con todos y su cualidad era que no andaba hablando de sus compañeros (...) — me decía que media vez haya trabajo, hay que darle jefe", sostuvo un subinspector.
De acuerdo con fuentes policiales, el ataque ocurrió cuando salía de una iglesia de la zona y un grupo de sujetos, que presumen son pandilleros de la MS, lo esperaron y lo atacaron a balazos.
El ataque sucedió a eso de las 7 am cuando el agente transitaba por la calle principal del cantón y un grupo de sujetos le salió al paso y le disparó varias veces.
A eso de las 3:15 de la tarde falleció en un hospital.
"Él tenía el anhelo de incorporarse a la universidad para estudiar la carrera de abogado, creía que con la llegada del nuevo Gobierno tendría mejoras salariales para costearse los estudios", sostuvo un compañero.
El movimiento considera que el nuevo jefe policial ha sido tajante en la exclusión de los agentes del nivel básico que quieren optar a un nuevo cargo dentro de la corporación.
Los informes policiales detallaron que Díaz gozaba de licencia y había empezado a ingerir bebidas alcohólicas desde un día anterior.
Según las investigaciones policiales, los detenidos simulaban realizar allanamientos con orden judicial presentando documentación falsa.
