El fiscal general dijo que han realizado investigaciones en las que involucran a diferentes fuentes humanas que aportaron información para llegar a ese sitio.

Según la información que brindó un familiar a las autoridades, la mujer sufría de violencia intrafamiliar por parte del marido que tiene dos años de trabajar en la finca, pero nunca lo denunció.

En total serían siete las osamentas las que estarían enterradas en el cementerio, las cuales tendrán que ser desenterradas.

La mujer murió en circunstancias poco claras, pues según el dictamen forense se ahogó, pero no se ha determinado si los sujetos estuvieron involucrados en la muerte.

La abuela de Sandra N. culpó a un pastor evangélico que vive en la misma casa donde vive la joven de “haberla tentado” y ser el padre de la niña muerta