Las víctimas andaban en una motocicleta realizando cobros a clientes que tienen préstamos con la institución financiera y les salieron al paso sujetos armados, quienes les dispararon.
El criminal es buscado intensamente por vínculos con una banda de robos, sicarios y narcotráfico.
El jefe de la policía dijo que se está trabajando con otras instituciones a manera de relacionar los datos que se tienen y de esa manera tener una cifra confiable de las personas desaparecidas.
Debajo de un “racimo” de plátanos había un paquete, cuando lo abrieron encontraron un “polvo blanco“ y tras los análisis la sustancia dio positivo de cocaína.
En la zona en donde se cometió el crimen asecha la pandilla Mao Mao y la MS-13, por lo que no se descarta su participación en este homicidio.
Los familiares tumbaron la puerta y encontraron tirada en el suelo a la mujer, ensangrentada debido al "puyón" del lado del corazón que presentaba. A un metro de distancia del cadáver, encontraron un cuchillo pequeño con el que fue asesinada.
Los vidrios hirieron el rostro de la joven.
La mujer cayó a una profundidad de ocho metros y estuvo atrapada por casi una hora en donde gritaba solicitando auxilio y pidiendo que no lanzaran piedras. Éstas últimas las tiraban familiares y vecinos para saber si ella esta con vida.
La mujer fue absuelta de los cargos debido a que la persona que la conocía no llegó a los tribunales. Él dueño de los vehículos nunca tuvo contacto con la imputada.
La detención fue realizada por agentes policiales de la División Fronteriza de la PNC.
