Hay dos personas implicadas en el asesinato pero solo se ha logrado capturar a uno.
El cuerpo de Miranda estaba semienterrado y sólo se le podían apreciar su cabello y parte de los pies, según dijo una fuente policial.
Durante el juicio la fiscal explicó que los pandilleros habían lanzado una alerta de manera general en la que sentenciaban a todo aquel que diera información.
Después de haber sido asesinado el agente antinarcóticos, la Policía realizó un operativo de búsqueda de los hechores en la zona, logrando detener a un sujeto, quien se presume participó en el hecho.
El director de la PNC explicó que poseen pruebas, como el vestuario, que podría tener relación con el caso de la familia desaparecida del preparador físico del Sonsonate F.C. Además, indicó que hubo seis capturas de pandilleros relacionados al caso de homicidios.
Una fuente policial consultada sostuvo que la víctima no residía allí, pero era conocido del lugar ya que siempre llegaba a desayunar al mismo comedor.
La Policía presume que la mujer cometió el crimen para que su actual compañero de vida que está en Estados Unidos no se diera cuenta porque pensaba que ya no le iba mandar dinero para la manutención de sus otros dos hijos y ella misma.
El militar estaba realizando su servicio en el Destacamento Militar #4 en Morazán.
La hipótesis que por el momento se maneja es que “los cipotes quizás pensaron que sabía mucho y por eso lo mataron”, aseguró un oficial.
Son más de 25 personas las que fueron capturadas en las últimas horas, quienes son acusados por los delitos de posesión y tenencia de droga, daños, amenazas, tenencia, portación o conducción ilegal o irresponsable de arma de fuego, receptación, y agresión sexual.
