Un juzgado santaneco le dio una pena de cinco años de prisión por el delito de robo.
El hecho se produjo por problemas económicos que vivía la familia dedicada a un negocio familiar.
La policía halló los recipientes donde la mujer asegura que están los cadáveres de las víctimas
La revelación la hizo Gerard Piqué, quien explicó que su famoso tuit con la leyenda "Se queda" fue un último intento para tratar de convencer a su excompañero en el Barcelona.
El vigilante, de 61 años, dijo que actuó en legítima defensa; que los mareros lo tenían "marcado", porque querían quitarle el arma de su trabajo.
El religioso mormón contó el abuso a la madre de la víctima, una niña de 13 años, por lo que esta denunció ante la justicia.
El caso tiene reserva total, por lo que no se quiso dar mayor información sobre la pena que deberá cumplir.
