La niña guardó silencio porque el imputado la amenazó a muerte a ella y le dijo que atacaría a su madre.
Una mujer en Honduras fue localizada en una casa abandonada en la que se encontró abundante evidencia de que fue sacrificada en un rito satánico.
El hombre de 35 años de edad aprovechó que Sara, de 16 años, le pidió que la llegara a traer a su casa para comprar marihuana por estar enojada con su progenitora.
La mujer mandó a su hija a cambiar un billete cuando el hombre le habría pedido un beso a la menor.
La mujer, con siete semanas de embarazo, recibió un disparo en la espalda, pero está estable. Su pareja, de 21 años, enfrenta cargos por el descuido de dejar el arma cargada y al alcance de los niños.
Evelyn Esmeralda Sánchez de Castellón, la madre, será acusada por inducción, promoción y favorecimiento de actos sexuales o eróticos.
La bebé estaba cerca de la pila de la vivienda, envuelta en una bolsa plástica. La madre está bajo custodia en un hospital.
La tarde de ese mismo día, el joven hizo una publicación en la red social confesando su crimen y pidiendo a sus contactos que no necesitaba de oraciones ni obtener un perdón por asesinar a su madre.
El sábado se contabilizaron 20 homicidios en el país, 10 de ellos fueron pandilleros, según la Policía.
Los familiares de otra de las víctimas señalaron que este incluso era parte de un grupo de alabanzas en una iglesia.
