Al observar que el sujeto peleaba con el menor, la sentenciada colaboró al agarrarle el brazo a la víctima para neutralizarla; eso fue aprovechado por el agresor para asestarle cinco puñaladas.
Jorge R. conducía una motocicleta para la que no portaba licencia, según la Policía, y Alma Emperatriz Mejía viajaba como acompañante, cuando sufrieron el accidente.
Según las investigaciones, Alfaro se aprovechó de su posición de pastor de la iglesia y le pidió a la mamá de la víctima que enviara a la menor a su casa para que le ayudara en los quehaceres.
También el menor intentó asesinar con el mismo machete a una mujer; no obstante, ella logró huir del lugar. La Policía capturó al homicida quien será acusado de homicidio agravado.
Torres fue condenada a 14 años de cárcel al ser encontrada culpable por inducción al abandono continuado y agresión sexual en menor o incapaz.
El violador enfrentó la vista pública en el Tribunal Quinto de Sentencia de San Salvador y fue condenado a 17 años de prisión.
Ambos serán acusados ante la justicia por homicidio y agrupaciones ilícitas. De ser vencidos en juicio, podrían purgar una pena en prisión de 50 años.
