La azafata sufrió heridas leves y la Policía Metropolitana de Tokio detuvo al hombre después de que el avión aterrizó.
La medida ordena "disponer la movilización e intervención de las Fuerzas Armadas y Policía Nacional en el territorio nacional para garantizar la soberanía e integridad territorial contra el crimen organizado transnacional, organizaciones terroristas y los actores no estatales beligerantes conforme lo expuesto en el presente Decreto Ejecutivo".
El pasado miércoles 3 de enero, cuando iba a recibir su sentencia y condena, Deobra Redden sorprendió a todos en el salón de audiencias cuando saltó hacia el estrado de la jueza Mary Kay Holthus para atacarla.
Según los testimonios de los pasajeros, varios artículos, incluidos teléfonos, fueron succionados fuera del avión cuando repentinamente se despresurizó.