Según la Fuerza Armada, los vehículos fueron abandonados por sus ocupantes al notar la presencia de los militares.
Fueron decomisados durante un operativo realizado la madrugada del miércoles en Mejicanos y Ayutuxtepeque.
En la primera subasta, en octubre de 2018, los diputados lograron vender 10 camionetas y recaudaron un total de $331,500.
Dos de las camionetas no fueron vendidas en la subasta, sin embargo, los legisladores aún no han decido qué hacer con ellas.
Con el DUI en la mano, los interesados en los vehículos podrán comenzar a pujar por el automotor de su preferencia en una subasta que se tiene previsto realizar a finales del presente mes.
Tras presión de la opinión pública los parlamentarios decidieron no utilizar los vehículos de lujo que por reglamento les han sido asignados.
Quienes ya recibieron las camionetas asignadas fueron los jefes y subjefes de cada fracción que conforma la Asamblea Legislativa.