Cumplió la pena en el Centro Penitenciario de Metapán, donde tomó clases de inglés, desarrollo de valores, fútbol, levantamiento de pesas, prevención de violencia intrafamiliar, talleres de pensamiento creativo y resolución de problemas.
Las quejas públicas de Charlotte no fueron bien recibidas por los encargados de la clínica y recibió una respuesta insólita por parte del supuesto gerente.
Miembros de la División de Armas y Explosivos de la PNC llegó al lugar y negó que existiera una amenaza real.
Según la Fiscalía, la investigación es por vender aceites calibradores de equipos médicos como cura del chikungunya.
La medicina era reempacada y vendida al público en la clínica privada.
La clínica, denominada Wellness Bio Energetic Medical Center, ofrece a sus clientes procedimientos curativos y con un resultado del 90% mediante el uso de energía universal.