El hombre que disparó a Reagan el 30 de marzo de 1981 en las afueras de un hotel en Washington dijo que lo había hecho para impresionar a la actriz Jodie Foster.
Una resonancia magnética revela que el cerebro del embajador está en buen estado, informó un galeno de este centro asistencial.
Agentes destacados en Cabañas auxiliaron a la embarazada quien dio a luz en una patrulla.
Los médicos resolvieron apuntarle las manos y los pies a la paciente por un virus que le causó una infección, aparentemente debida al catéter contaminado.
Los cuerpos yacían esparcidos en medio de un mar de sangre y de trozos de vidrio; los sobrevivientes, en estado de conmoción, trataban de reconfortarse mutuamente. Muchas víctimas vestían traje y corbata.
Con el nuevo equipo se espera beneficiar a 1,500 niños.
Medios locales señalan que el atacante se suicidó, al parecer hay heridos.
El agresor, un joven de 26 años, es un exempleado del hospital quien se entregó una hora después del ataque.
Los agresores que habían violado y mandado a un hospital a la mujer llegaron al centro médico para volver a atacarla.
