El cuerpo de Molina estaba sin camisa y zapatos, además su rostro estaba ensangrentado.
“A mi esposa la dejé perdida... solo le dije que ya iba a regresar y me fui corriendo a la planta y cuando llegué les expliqué a los empleados que era bombero”, relató.
Informes preliminares de las autoridades detallaron que los pandilleros llegaron hasta la vivienda de la víctima y lo atacaron.
La incineración de la droga se realizó en un predio baldío en el cantón San José Changallo, de Ilopango.
Después de encontrar que no había un distanciamiento social e irregularidades en los pagos a los trabajadores, el ministro de Trabajo ordenó el cierre temporal del negocio.
La sede policial contará con puesto de guardia, área de toma de denuncias, bodega, oficina administrativa, armería, dormitorios, lavandería, bartolinas, sistema de videovigilancia, estacionamiento y cocina.
Investigaciones de la Fiscalía detallaron que Dimas Romano ofreció sus servicios profesionales y recibió el dinero, pero nunca cumplió con sus compromisos.