Por la estafa, la víctima denunció el caso ante la Policía y Fiscalía, quienes lograron capturar a los imputados y presentarlos ante las autoridades judiciales.
El delincuente fue llevado a los juzgados donde le ordenaron que usara brazalete electrónico y pagara una fianza de $1,000 para recuperar su libertad pero de forma provisional.