l sujeto fue detenido el pasado 4 de julio de 2018, cuando transitaba en estado de ebriedad sobre la 10° avenida Sur y calle Delgado de San Salvador.
El exmandatario enfrenta cargos de espionaje a unos 150 opositores durante su gobierno desarrollado en 2009 a 2014.
El imputado llegó cerca del parque San Martín y se detuvo a platicar con dos travestis, con quienes se relacionaba. Minutos más tarde se unió la víctima y comenzó una discusión. Posterior a ello, el acusado habría desenfundado un arma de fuego y le disparó.
Según la denuncia de la FGR, el sacerdote agredió a su víctima durante dos años en la casa parroquial de la iglesia que tenía a su cargo.
De acuerdo a la exfuncionaria de la comuna, la problemática generada por el caso judicial le ocasiona una carga grande de estrés y esto no le ayuda a su estado físico.
Martínez divulgó una serie de conversaciones personales de la víctima, en el contexto de una investigación en la que se utilizó el sistema de intervención telefónica.
Arévalo Flores enfrentará un juicio, cuyo delito por el que es señalado es sancionado con una pena de 30 a 50 años de prisión.
El imputado, de 20 años de edad, indicó que al momento de los hechos manipulaba un fusil M-16 y accidentalmente se disparó el arma.
Dos meses después, el agente se enteró que habían detenido a un sujeto por el delito de tenencia portación ilegal de arma de fuego y esta podría ser la que le había robado días atrás.
El exauxiliar contable de Casa Presidencial era el último en la cadena de mando dentro de la jerarquía creada por el expresidente Saca para desfalcar las arcas del Estado y ahora es el último de la fila que lucha por demostrar su inocencia.
