La víctima tenía 17 años y venía de jugar con sus amigos, cuando se encontró a dos pandilleros de la contraria y lo mataron.
La pandilla a la que pertenece opera en Aguilares, Guazapa y el Paisnal de San Salvador, así como en el municipio de Quezaltepeque en la Libertad.
Fueron siete sujetos los que participaron en este asesinato, en el que a sangre fría le dispararon decenas de veces en el rostro a la víctima porque no quiso sumarse a la pandilla.
En una de las guaridas se encontró un arma policial con reporte de extravío y en el otro armamento de guerra y municiones.
Se habla de que una de las mujeres asesinadas tenía un grado de liderazgo en el grupo delincuencial.
El sospechoso de los asesinatos fue capturado con 318 porciones de crack cuando estaba planeando su distribución con otro delincuente que logró escapar.
La policía capturó a 18 sospechosos de participar en el crimen del oficial que fue a visitar a su novia y nunca regresó al puesto policial de Yucuaiquín.
El sujeto llegó a la casa de su víctima con otros tres hampones disfrazados de policías
