De acuerdo con la investigación de la Fiscalía, el acusado le exigió dinero a su abuela y al discutir con ella la atacó con un cuchillo hasta causarle la muerte.
El condenado amenazó a la niña con que si contaba lo sucedido, le haría daño a sus hermanos y a su madre.
La víctima acompañó a su abuela al negocio familiar, que está ubicado cerca de la oficina donde trabajaba el violador. Este aprovechó la situación para llevar al menor a su oficina y allí cometió el delito.
El requerimiento fue presentado este martes 3 de enero por la FGR en el Juzgado de Paz de San Miguel. El sospechoso fue acusado de desórdenes públicos.
Un testigo en el juicio declaró que Luis Eduardo Mejía le comentó que estaba harto de "andar acabado" (estar sin dinero) y que solo existía una manera de arreglar eso y era asesinando a su familia paterna. Todo eso lo expresaba "de manera fría".
En el juicio se determinó que Juan Antonio Velásquez Romero, después de asesinar a la víctima, fue a enterrarla en un cafetal.
Se les acusa de robo agravado, agrupaciones ilícitas y tenencia y uso indebido de trajes-uniforme. Los agentes y una persona particular se reunían en un taller mecánico y luego salían a los lugares en donde robaban celulares, dinero, armas de fuego, joyas y hasta cajas fuertes, indicó la Fiscalía.
