Hasta este sábado la PNC sigue sin pistas sobre el paradero de Enrique Rais, quien tiene la ciudadanía suiza, y de otros implicados a quienes el viernes se giró la orden de recaptura, pero la notificación se filtró antes a la prensa que a los acusados.
Según el ministerio público, Martínez puso la Fiscalía a disposición del empresario Enrique Rais, quien la utilizó para dañar a sus enemigos. Martínez sostiene su inocencia.
El exfuncionario dijo a la salida de juzgados que los delitos que se le imputan es "por venganza de sus enemigos". El resto de implicados aún no han sido detenidos.
Martínez y Rais podrían ser capturados en las siguientes horas, luego que la notificación sea recibida por la PNC. Actualmente gozan de medidas sustitutivas.
El exfuncionario realizó una serie de viajes que presentaba como de trabajo pero que en realidad eran de placer, asegura el magistrado.
El video, según Dany Dalton, exagente de la DEA, fue una trampa de Funes al exfiscal. Funes, por su parte, pidió "no jodan".
En su calidad de testigo criteriado, Luis Martínez habría admitido que recibía una remuneración adicional a su sueldo como jefe del ministerio público, tal como lo reveló días atrás el magistrado constitucional Sidney Blanco.
Un exfiscal ideó un plan para despistar a sus colegas que andaban tras los pasos de su hijo, quien es procesado por pertenecer a una banda de robacarros que operaba en diferentes puntos de San Salvador.
La investigación en contra del exfuncionario que enfrentaría un tercer proceso judicial fue confirmado por una fuente fiscal.
En el juzgado segundo de paz se realizará la audiencia inicial contra el ex fiscal Luis Martínez, acusado de divulgar material reservado en perjuicio del Padre Toño.
