Según la PNC, dos sujetos con apariencia de pandilleros se subieron una parada previa a donde se iba a bajar su víctima, y después de ubicarla le dispararon en la cabeza.
La prueba de alcotest dio como resultado 210 grados de alcohol en la sangre, informó la PNC.
La respuesta del microbusero surgió debido a las denuncias de algunos usuarios de esa ruta, que están cobrando $0.45 en lugar de los $0.25 por medio recorrido.
Los afectados dicen estar "al límite" porque no tienen forma de llevar ingresos a sus familias.
Sin ninguna piedad los criminales cometieron la barbarie para luego enterrar sus restos en otro lugar. El crimen ocurrió en el 2011.
La Policía se encarga de constatar que no haya desorden y que los ciudadanos justifiquen su salida de casa.
En el caso de los microbuses no más de 20 usuarios y en buses menos 50.
