El empleado del hospital aprovechó a abusar sexualmente de la joven de 15 años de edad cuando esta se encontraba sedada por un medicamento que le habían suministrado.
Él se preparó para dar una charla en el salón frente a otras personas de A. A. pero no se imaginó que esa podría ser su última noche en el estrado.
Un pasajero que presenció el robo y la amenaza en contra de la víctima sacó su arma y le disparó por la espalda al imputado cuando estaba por bajar del autobús. El hombre fue detenido por la PNC.
Amenazas de muerte y secuestro de uno de sus hijos fue el ultimátum que recibieron dos mujeres de parte de dos hermanos que llegaron a su vivienda.
La juzgadora del Primero de Instrucción de Soyapango envió el caso a la siguiente etapa de vista pública, debido a que consideró que los elementos son suficientes para poder ser desfilados en juicio.
Si bien es cierto se cuestiona el hecho por tratarse de una menor de edad, no consumaron un acto de agresión sexual, por lo que la esfera de protección de derecho penal no abarca esta situación.
El estado de ebriedad que ese día tenía José hizo que tomara el valor de sustraer de una cartera la pistola de la agente policial y con la misma fue a amenazar a los invitados de una fiesta.
El hecho ocurrió el 11 de julio de 2016 cuando se encontraba estacionado en la orilla de la carretera de Oro, específicamente por el cementerio general de Soyapango.
El proceso judicial tiene previsto una duración de dos meses por los 500 testigos que fueron admitidos.
Luego de que el médico muriera de un paro cardíaco el pasado mes de abril, su hijo declaró que la pareja sentimental de su madre no había cometido ningún delito en contra de él.
